Breve historia del proyecto

A finales del año 2004, los doctores Pilar Máynez y José Rubén Romero Galván presentaron al doctor Miguel León-Portilla un proyecto que habían venido concibiendo desde hacía varios meses atrás y que consideraban de enorme importancia para la plena comprensión de una de las fuentes fundamentales del México prehispánico y novohispano: el Códice florentino. Historia general de las cosas de Nueva España elaborado por fray Bernardino de Sahagún (1499-1590) y sus informantes indígenas. Este invaluable testimonio, realizado inicialmente en lengua náhuatl en 1547 al que posteriormente el franciscano incluyó una versión libre y resumida al castellano, contiene, asimismo, alrededor de 2468 ilustraciones en 2446 páginas, y se concluyó entre 1577 y 1579. El Códice Florentino cuya designación se debe al repositorio italiano que lo ha albergado por siglos, concentra en doce libros los diversos saberes de las cosas divinas, humanas y naturales, así como lo acaecido en la Conquista de México, de ahí que haya sido calificado por Ángel María Garibay como la “enciclopedia de los nahuas del altiplano central”.

A lo largo de cinco siglos, el apartado en lengua mexicana o náhuatl, que constituye el texto más completo y detallado obtenido de los informantes de Sahagún había permanecido sin ser traducido al español; sólo se contaba con el transvase fragmentario de unos cuantos capítulos que habían realizado de manera aislada algunos estudiosos, por lo que los académicos Máynez y Romero consideraron fundamental emprender la paleografía y traducción completas. No obstante, la empresa representaba dificultades de consideración por la amplitud de la obra y la serie de decisiones de diversa naturaleza en cuanto a ambas tareas. 

Respecto al primer punto, se trataba de realizar una transcripción paleográfica de todos los libros que componen el manuscrito, como quedaba advertido en el propio título del proyecto. El procedimiento que seguiríamos fue mantener, de manera sistemática, un solo criterio para la fijación de las grafías, así como para la indicación de las omisones y errores advertidos en las mismas y de algunos agregados sobrepuestos que se advertían en el manuscrito. El texto base fue la edición facsimilar publicada por el Archivo General de la Nación (1979), pero también consultamos las útiles ediciones en línea con la que desde hace algunos años se cuenta. Asimismo, se consideró pertinente emplear las herramientas proporcionadas por la ecdótica para la edición que pretendíamos realizar: ésta debería contener un riguroso aparato crítico que contemplara la relación existente entre las dos columnas del Florentino, pero también entre el resto de los textos preparatorios al Códice recogidos, revisados y traducidos por fray Bernardino de Sahagún y sus colaboradores indígenas a partir del año 1547. 

Igualmente, la traducción de la lengua mexicana al español —la segunda tarea del proyecto que estaba vinculada con la anteriormente descrita— requería, en principio, una serie de decisiones que habría que ir matizando o modificando en la práctica y, por supuesto, en conjunto: ¿Sería una traducción literal o libre? ¿Qué alusiones propias de la realidad indígena deberíamos mantener en su forma lingüística original o como nahuatlismos y cuáles tendríamos que traducir para hacerlas más comprensible al lector actual? ¿Qué variante del español tendríamos que emplear? 

El proyecto inició oficialmente a principio del año 2005 en forma interinstitucional entre el Instituto de Investigaciones Históricas y la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, pertenecientes la Universidad Nacional Autónoma de México. El grupo de trabajo quedó integrado por: María José García Quintana (quien tendría a su cargo el Libro Primero); Giovanni Marchetti, adscrito a la Universidad de Bolonia (el Segundo); Miguel Pastrana (el Libro Tercero); Pilar Máynez (el Cuarto); Patrick Jo- hansson (el Quinto); Miguel León-Portilla, Librado Silva Galeana e Ignacio Silva Cruz (el Sexto); Ascensión Hernández de León-Portilla (el Séptimo); Andrea Martínez Baracs, adscrita al CIESAS (el Octavo) y posteriormente Roberto Martínez y Mario Castillo Hernández (el Noveno); José Rubén Romero Galván (el Décimo); Guilhem Olivier, Salvador Reyes Equiguas, Élodie Dupey García (el Décimo primero), y Federico Navarrete y Berenice Alcántara (el Décimo segundo). 

A este equipo se incorporaron también Francisco Morales Valerio (OFM), quien ofreció varias charlas al grupo sobre las implicaciones de la evangelización en México durante la época novohispana; Marc Thouvenot, autor de un programa especial de computación para uniformar las variantes gráficas incluidas a lo largo del Códice florentino impartió una serie de talleres para usar de manera eficiente dicha herramienta. Asimismo, Javier Sanchiz nos orientó sobre los principios que podrían regir sistemáticamente la tarea paleográfica; Mauricio Beuchot expuso en una de las sesiones los aspectos hermenéuticos de mayor relevancia que deberíamos tomar en cuenta, y Tomás Serrano y Céline Desmet tuvieron a su cargo un breve, pero muy útil, taller sobre  teoría y práctica de la traducción.  

Los productos emanados de la primera época del proyecto “Paleografía y traducción del Códice florentino” han sido de enorme importancia, entre ellos se destaca: la publicación electrónica de las paleografías en el sitio sup-infor con su correspondiente normalización gráfica; la presentación de los avances de cada uno de los integrantes en tres coloquios y la subsiguiente difusión de sus respectivos trabajos ya en la modalidad de capítulo de libros colectivos; asimismo, la publicación de las traducciones de algunos fragmentos que han venido realizando los miembros del primer equipo en un apartado creado especialmente para ese propósito en la revista Estudios de cultura náhuatl a partir del número 42.

Desde el año 2020 y con el desafortunado deceso del doctor Miguel León-Portilla, se realizaron una serie de ajustes en cuanto a la sede y la participación de nuevos integrantes al grupo también de expertos paleógrafos y traductores. El proyecto se trasladó a la Facultad de Estudios Superiores Acatlán. Se retomaron los criterios previamente establecidos en cuanto a la paleografía y traducción que fueron el producto de una larga serie de consideraciones. Se incorporaron los doctores Juan Carlos López Torres, Sara Lelis, Gabriel Kruell, Citlalli Bayardi, Lucero Pacheco, Daniel Altbach y el maestro Julián Saldierna. 

Los avances obtenidos en esta segunda época han resultado muy significativos. Se editó el Libro Primero que había concluido la maestra María José García Quintana al cual, José Rubén Romero y Pilar Máynez añadieron el prólogo que debe anteceder a la traducción de cada apartado; posteriormente, Juan Carlos Torres López hizo lo propio con el Séptimo Libro “de la astrología y filosofía natural”, y Sara Lelis y Pilar Máynez realizaron la paleografía y la traducción del náhuatl al español del Libro Tercero intitulado por Sahagún “Del principio que tuvieron los dioses”. 

En los próximos meses se tiene programado la conclusión del Libro Cuarto, Quinto y Octavo que daremos a conocer también en  el blog http://blogs.acatlan.unam.mx/shistoriografialinguistica (rubro manuscritos) y en este espacio que hemos destinado especialmente para los avances del proyecto. 

 Pilar Máynez
Coordinadora del proyecto
Febrero 2023